Les contaré la historia de los primeros indígenas de la Tierra del Fuego que pisaron suelo europeo. Ocurrió hace más de 150 años y entre ellos había una niña y un niño.
En el año 1826 zarparon de Inglaterra dos barcos con el objetivo de explorar las costas del sur de América. Tras cuatro años de navegación y exploración del territorio, retornaron a Europa con cuatro habitantes de la Tierra del Fuego: un niño yagán y una niña y dos hombres que pertenecían al pueblo kawesqar.
Los ingleses llamaron a la niña Fuegia Basket, al niño Jemmy Button y a los dos adultos York Minster y Boat Memory, sin reconocer sus nombres reales.
La decisión de viajar a Europa no fue de los fueguinos. Más bien, fue la idea de uno de los capitanes ingleses: Robert Fitz-Roy. Fitz-Roy quiso llevarlos a Europa para enseñarles el idioma inglés y sus costumbres, esperando que ellos posteriormente regresaran a la Tierra del Fuego y pudieran enseñar lo aprendido a sus comunidades.
En 1833, después de una larga estadía en Inglaterra, los fueguinos regresaron al sur de América junto a Fitz-Roy a bordo del Beagle, el mismo barco en el que viajó el científico Charles Darwin.
Una vez que retornaron a sus comunidades, pasó algo que Fitz-Roy no esperaba. Los fueguinos olvidaron o quisieron olvidar lo aprendido en Europa y retomaron la forma de vida de las comunidades en las que nacieron y de las que habían sido forzosamente separados. Cuando le preguntaron a Jemmy Button si quería retornar a Europa, dijo que no: amaba la tierra, la gente y las costumbres de su lugar de orígen.
Los invito a conocer a estos fueguinos, retratados por los viajeros ingleses.
Búho Medina.